¿Qué pasa si estamos mucho tiempo de pie?

El ser humano no está diseñado para permanecer mucho tiempo en una misma posición, ya sea sentado, tumbado o de pie. Mantener una misma postura sin moverse durante un tiempo prolongado puede derivar en problemas de salud. En el ámbito laboral existen muchas profesiones que requieren pasar horas y horas de pie. Estos trabajos, a la larga, desembocan en patologías.

Una de las principales afectaciones es el sistema circulatorio. Permanecer de pie sin moverse durante periodos de tiempo prolongados ocasiona que la sangre fluya menos. Así se producen más calambres, contracturas musculares y roturas de fibras. Así se dan más casos de tendinitis en los tobillos y también aumenta el riesgo de sufrir arterioesclerosis y enfermedades coronarias más severas.

Otro de los problemas derivados es la insuficiencia venosa. El sedentarismo, unido a otras causas como la edad, el sobrepeso, el consumo de alcohol y tabaco o procesos biológicos como el embarazo y la menopausia son las causas de esta afección. Las venas se deforman y se vuelven más rígidas, de manera que la sangre se acumula en los pies y puede desembocar en inflamaciones.

Además de la práctica rutinaria de ejercicio y de los tratamientos farmacológicos, para ayudar a mejorar la circulación sanguínea desde el punto de vista podológico actualmente se están utilizando plantillas a medida. Con cada paso que damos se comprime la grasa de la planta del pie como si de una esponja se tratara, por ella pasan muchas venas y arterias de pequeño tamaño, lo que ayuda a bombear la sangre hacia arriba. Se cree que el contacto de una plantilla a medida con toda la planta del pie ayuda a comprimir más superficie, contribuyendo a mejorar la circulación.

El standing o pasar mucho tiempo de pie también puede causar problemas de artritis. La inflamación de las articulaciones de los huesos puede provocar deformaciones y causar dolor. Mantenerse estático demasiado tiempo hace más rígidas las articulaciones y los ligamentos.

La fascitis plantar es uno de los problemas más relacionados con permanecer muchas horas de pie. La fascia cubre la planta del pie, desde el talón hasta los dedos de los pies. Si sufre demasiado estrés se producen microrroturas y la fascia se inflama. Esto causa dolor, sobre todo en la zona del hueso calcáneo (talón). El calzado inadecuado que se utiliza al estar de pie durante demasiado tiempo puede acentuar la fascitis plantar.

Otros problemas que causa en los pies son los juanetes. No es recomendable utilizar tacones o calzados de plástico o de puntera estrecha. Lo más aconsejable es utilizar zapatos cómodos de materiales transpirables o cuero, con una suela resistente, siempre con calcetines.

Por último, para cuidar la buena ergonomía en el trabajo es fundamental mantener una postura correcta. Por muy estático que sea el puesto de trabajo, se debe cambiar la postura cuando sea posible. En la medida de lo posible, ayuda tener un mueble de apoyo con una altura ajustada en función de la tarea que se realiza. Por supuesto, en los tiempos libres hay que tener a mano un asiento para descargar la tensión acumulada. Por último, el tipo de superficie también afecta a la ergonomía. Existen alfombras especiales y acolchadas especialmente diseñadas para reducir la fatiga en el ámbito laboral.

Por todo esto es recomendable acudir de manera periódica al podólogo, que ayudará a prevenir y solventar todas estas patologías