ALTERACIONES DE LAS UÑAS EN LOS ANCIANOS

Las afecciones de los miembros inferiores son una de las principales causas de la limitación de la actividad de los ancianos. Es necesaria una atención primaria en los problemas del pie para intentar que estas personas no pierdan la movilidad y se reduzca el dolor. Lo que debemos tener en cuenta es que las pérdidas funcionales en los distintos órganos y sistemas se producen de manera muy diferente según las características de cada persona.

Los podólogos han desarrollado sistemas de evaluación geriátrica global para mediante una evaluación multidisciplinar llegar a identificar, describir y explicar los problemas de las personas mayores dependientes, si es posible.

Entre las modificaciones y alteraciones que más inciden en las enfermedades de los pies destacan los problemas biomecánicos-ortopédicos, los trastornos dermatológicos y ungueales y los problemas en el paciente diabético. En esta ocasión nos vamos a centrar en los cambios y dificultades que se producen en las uñas.

Los años pasan y nuestras uñas sufren diferentes cambios que forman parte del proceso de envejecimiento.

Los cambios más destacados que se producen en la uña son:

  • Aumento del contenido de calcio
  • Descenso del hierro
  • Afectación de la epidermis de la capa ungueal produciendo una disminución del tejido elástico
  • Se engruesa la pared de los vasos sanguíneos subungueales
  • Disminución en el crecimiento de la uña

Las alteraciones que nos podemos encontrar en los pacientes de la tercera edad son muy diversas. Hacemos mención a las más conocidas y frecuentes:

  • Onicogrifosis. Se trata del aumento exagerado del grosor de las uñas, que terminan curvando en espiral. La lámina ungueal se vuelve gris opaca con acumulo de restos de polvo y con tendencia a incarnarse. Tiene mayor incidencia sobre la uña gorda del pie. La onicogrifosis se asocia a traumatismos repetidos, problemas biomecánicos, trastornos circulatorios y neuropatías periféricas, entre otras. El crecimiento de la uña onicogrifótica es lento y en muchas ocasiones dificulta al paciente el poder cortarse él mismo las uñas e incluso dificultades y dolor para calzarse
  • Uñas en vidrio de reloj. También se conocen como uñas hipocráticas. La alteración consiste en el engrosamiento del tejido que se encuentra por debajo de la uña de los dedos de los pies. Se aprecia visualmente por la curvatura de la uña hacia abajo. Asociadas a cardiopatías y alteraciones pulmonares
  • Hemorragias en astilla. Aparecen como líneas de sangrado de color rojo oscuro por debajo de las uñas. Se extienden en la dirección en que crece la uña. Las hemorragias son más frecuentes a nivel distal de la uña y le van a dar esa apariencia “en astilla” debido a que parece que el paciente tiene astillas clavadas debajo de su lámina ungueal.Se asocian a microtraumatismos, a la artritis reumatoide, la diabetes, alteraciones pulmonares, etc
  • Onicomicosis. Se trata de la infección de las uñas por hongos. Es muy común la infección de varias uñas a la vez. Los hongos, denominados dermatofitos acostumbran crecer en ambientes húmedos y cálidos. El cuadro clínico más frecuente que nos podemos encontrar es la onicomicosis subungueal distal y lateral que tras años de evolución deriva en una onicomicosis distrófica total
  • Coiloniquia. Las uñas son anormalmente delgadas y van perdiendo su convexidad pudiendo llegar a ser planas o cóncavas. Por ello se conocen asimismo como uñas cuchara. La coiloniquia puede estar originada por alteraciones de metabolismo de hierro, alteraciones de tiroides o enfermedades coronarias

En la actualidad una gran parte de los pacientes que acuden a una consulta podológica son mayores de 65 años. Esto hace que sea imprescindible conocer las alteraciones e infecciones de las uñas de este grupo poblacional. Es fundamental que el podólogo haga un correcto diagnóstico para evitar posibles tumores, ya que en los últimos años la frecuencia de tumores malignos del aparato ungueal ha aumentado considerablemente.

A las enfermedades de los pies, sobre todo cando afectan a las personas mayores, no se les presta la atención que precisan. En la mayoría de los casos el paciente piensa que estas dolencias aparecen como consecuencia del envejecimiento y no tienen solución. Los podólogos son los profesionales encargados de la evaluación geriátrica y de proporcionar un cuidado asistencial y preventivo con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes mayores

 

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